30 de diciembre de 2016

LOS ACANTILADOS DE ÉTRETAT.



En Etretat, los acantilados apenas han cambiado en varios siglos: se componen de Tiza turonense llamada "de Tilo", muy dura, en su base, y de tiza senoniana por encima, endurecida por muchos bancos de piedra.
Sin embargo, el Roc Vaudieu y la Aguja de Belval, son del mismo tipo que la Aguja de Etretat, de vestigios del acantilado y de sus arcos. Muestran la fragilidad de la costa muy susceptible a la erosión.
Es por esta razón que la preservación del medio natural sigue siendo una acción clave del lugar. El desarrollo y mantenimiento de senderos de la costa sigue siendo una prioridad, debido al número de visitantes. Los caminos de los acantilados se construyen con el respeto a la naturaleza.



Etretat es un milagro de la naturaleza que fue conocido gracias a la moda de los baños en el siglo XIX.
Si el pintor Isabey descubrió Etretat durante el primer impero; fue Alfonso Karr, en 1830, que cae bajo el hechizo de esta pequeña localidad.



Romántico teatro abierto sobre la Mancha, Etretat inspiró a los más famosos artistas. Jongkind , Monet , Boudin y muchos otros artistas inmortalizarán los acantilados de Etretat.
 France.FR


Acantilados de Étretat, con la famosa "Porte d'Aval".

Porte d’Aval - Aiguille.



Falaise d´Aval. Un arco natural, formado por la erosión del mar, que mide más de 70 metros.

"Trou à l’Homme " (Agujero del Hombre).


Guy de Maupassant lo comparó con un elefante metiendo la trompa dentro del agua.

Falaise d´Amont-El suave balanceo de los guijarros.

Chapelle Notre-Dame de la Garde, situado en Etretat, con vistas al mar desde lo alto del acantilado Upstream.

A la Chapelle Notre-Dame de la Garde, se llega subiendo por el acantilado.

Chapelle Notre-Dame de la Garde.

Construida a mediados del siglo XIX en honor de los marineros desaparecidos.

Senderos hacia los acantilados.

Fotografía;Lourdes Pujols

 El placer de pasar por los senderos que nos llevará al océano profundo.

Iré por los senderos hasta la costa solitaria.

Acantilados a través de los senderos.

Fotografía;Lourdes Pujols

Majestuosas escarpaduras.

La asombrosa verticalidad de los acantilados de la Costa de Albâtre.

Belleza salvaje.

Fotografía;Lourdes Pujols


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